Un problema que suelo encontrar en los alumnos principiantes es que ponen el mismo color, sin matizar, por toda la superficie del cuadro y/o por todo el objeto que están pintando. Si vais a utilizar un color, ir añadiendo una pequeña cantidad de otros colores para crear matices y para que no os quede todo igual, como si fuese una puerta o una pared. Al principio cuesta un poco, pero con el tiempo veréis que ganan los cuadros. Entre un matiz y otro podeis fundir muy suavemente, sin que se note demasiado el efecto fundido, pero intentando evitar que los matices queden como "parches" , inconexos unos con otros. El cuadro es un todo y tenéis que darle el sentido de la unidad, lo que no quiere decir que los colores no vibren.